Traslada a la ministra Ana Redondo la necesidad de hacer efectiva su obligatoriedad para toda la carrera judicial, “no como un complemento, sino como un requisito estructural, transversal y permanente”
La senadora de EAJ-PNV, María Dolores Etxano, ha señalado a la ministra de Igualdad que es “imprescindible” hacer efectiva la formación obligatoria en perspectiva de género para toda la carrera judicial, “no como un complemento, sino como un requisito estructural, transversal y permanente”. En la sesión de control de esta tarde, Etxano ha recordado a la ministra Ana Redondo que esta exigencia para jueces y fiscales está recogida en la Ley de garantía integral de la libertad sexual, y por ello, le ha mostrado sus dudas sobre si las 53 nuevas plazas judiciales anunciadas por el Gobierno central para asumir los casos de violencia sexual desde los Juzgados de Violencia sobre la Mujer a partir de octubre garantizarán la atención de esas víctimas.
La senadora jeltzale ha evidenciado la necesidad que tiene la Justicia de integrar “urgentemente y de forma efectiva”, una perspectiva de género en sus estructuras, en sus prácticas y en sus resoluciones, citando el ejemplo de la reciente sentencia absolutoria del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña. “Es necesario analizar cómo el sistema judicial aborda los casos de violencia sexual para garantizar que las víctimas sean escuchadas y protegidas adecuadamente”, ha indicado. En su opinión, la citada sentencia refleja una “preocupante carencia estructural de enfoque de género en el análisis jurídico. No basta con aplicar los tipos penales: hay que comprender que la violencia sexual no ocurre en un vacío, sino en un contexto de desigualdad estructural que condiciona cómo las víctimas narran, sobreviven y buscan justicia”.
Etxano ha aseverado que la perspectiva de género no implica que haya que dar por bueno lo que diga una mujer por el hecho de que sea mujer, “pero tampoco se puede exigir a las víctimas una lógica y una racionalidad en la toma de decisiones que es la propia del sistema judicial”. Por ello, ha emplazado a superar los estereotipos sexistas como eficaz herramienta de aplicación de la perspectiva de género. “Las mujeres no podemos prescindir de la tutela penal, pero los poderes públicos debemos reconocer y abordar sus graves limitaciones y desarrollar de forma integral las leyes aprobadas para mejorar su funcionamiento. En definitiva, mejorar la forma en que el sistema judicial aborda los casos de violencia sexual, para garantizar que las víctimas sean escuchadas y protegidas adecuadamente”.