Comunicado de EAJ-PNV ante las denuncias de fraude en las elecciones presidenciales y legislativas del 20 de Octubre de 2019 en Bolivia

El pasado 20 de octubre, en Bolivia tuvieron lugar elecciones para Presidente, Vicepresidente y Legisladores. Las anomalías registradas en la fase de escrutinio de los votos (al haberse interrumpido por 23 horas el recuento y haber cambiado sustancialmente la tendencia y, con ello, el destino de la elección) y la posterior dimisión del Vicepresidente del Tribunal Supremo Electoral han propiciado sendas denuncias de la Organización de Estados Americanos (OEA) y de la Unión Europea.

Comunicado de EAJ-PNV ante las denuncias de fraude en las elecciones presidenciales y legislativas del 20 de Octubre de 2019 en Bolivia 30Octubre
2019
30 Octubre 2019 |
EBB

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Ante las evidentes sospechas de irregularidad y el consiguiente agravamiento de división dentro del pueblo boliviano, ambas organizaciones proponen la habilitación de la segunda vuelta prevista para el 15 de diciembre. A pesar de las advertencias de los organismos internacionales, de pronunciamientos por parte de distintos gobiernos de Europa y de América, de las protestas de los partidos de la oposición y de las revueltas callejeras, Evo Morales se ha autoproclamado Presidente, avalado por el Tribunal Supremo Electoral, y ha agravado de manera muy preocupante la estabilidad social.

Ante la falta de transparencia y de fiabilidad de este proceso electoral, EAJ-PNV realiza las siguientes consideraciones:

1) Secundamos íntegramente el comunicado del Servicio Europeo de Acción Exterior, del 24 de Octubre, que determina que la opción más adecuada para salir del actual bloqueo y restaurar la confianza en el proceso electoral y en las instituciones sería la celebración de una segunda vuelta entre los dos candidatos más votados, Evo Morales y Carlos de Mesa.

2) Abogamos por un diálogo constructivo entre el gobierno del MAS (Movimiento al Socialismo) y las fuerzas de la oposición lideradas por Comunidad Ciudadana, en aras a asegurar el respeto pleno de la elección democrática del pueblo boliviano y a trabajar por una reconciliación nacional pacífica, evitando una escalada violenta que pudiera derivar en una inestabilidad creciente y preocupante tanto en el País como en la Región.

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